Cabaret Biarritz, José C. Vales
Hacía tiempo que una novela no me brindaba tanto placer, lo que suena un poco cursi pero se acerca de forma bastante gráfica a mi sensación. Mi último entusiasmo comparable se produjo con Nos vemos allá arriba de Pierre Lemaitre. Como he reconocido en ocasiones, no soy una gran entendida en literatura ni tengo grandes exigencias a la hora de elegir un libro. Sin embargo, últimamente me cuesta encontrar algo que me cautive, conmueva o sorprenda y, cuando aparece, lo celebro con grandes loas.
José C. Vales es uno de mis “seguidos” en Twitter desde hace bastante tiempo. Cuando me enteré de que había ganado el Premio Nadal, me alegré mucho, como lo haces cuando a un viejo amigo le dan una buena noticia. Lo cual no deja de ser una estupidez porque en realidad no lo conozco más que de un par de tuits intercambiados. En fin… el poder de las redes, que también hizo que comenzara con cierta suspicacia la novela, de esa manera también tan nuestra, tan española, de minusvalorar de antemano lo que nos resulta cercano.
Sin embargo, desde la introducción cayeron mis reservas y me enamoré totalmente del planteamiento, la estructura y la historia. A esta novela no le pongo ni un pero. Es original y de un gusto exquisito. Hasta la portada me encanta.
No resulta fácil condensar en unas pocas líneas el argumento de la novela, cuando además otros ya lo han hecho de forma maravillosa, como Francisco Solano en esta crítica publicada en Babelia, que suscribo punto por punto.
Solo me queda, pues, animarles a leer Cabaret Biarritz, de la que me engancharon hasta las notas al pie. Espero que obtengan un placer cuasi sicalíptico.
No dejas mucho margen a la duda. Le tengo ganas a Valés, pero no sé porqué su anterior libro no me animaba lo suficiente. Creo que era porque esperaba este 🙂
Un abrazo
¡Hola Ana!
Uy, miedo me da, que tú eres una experta, jajaja. Bueno, si te animas, espero que te guste tanto como a mí 🙂 :
¡Un beso!
Gracias por la recomendación, he disfrutado muchísimo con su lectura. Es original, entretenido, con una buena dosis de cinismo y mantiene la intriga. Después me leí El pensionado de Neuwelke y me recordó a la Dama de blanco de Wilkie Collins, encontré que le faltaba algo, no termina de rematarla. Por cierto, si no has leído aún nada de Leonardo Padura, seguro que te gustará. De momento he leído unos relatos y La neblina del ayer y me ha parecido una novela magnífica, tengo más pendientes. Besos: Sol.
¡Me alegra mucho que te haya gustado! Y tendré en cuenta tu recomendación; la verdad es que no he leído nada de Padura. Muchas gracias.
Un besote.