Lo que encontré bajo el sofá, Eloy Moreno
Esta novela trata más de lo que escondemos que de lo que encontramos bajo el sofá. De todo aquello que ocultamos a los demás y, sobre todo, de lo que nos queremos ocultar a nosotros mismos: los secretos, el desamor, los remordimientos, la vergüenza, la cobardía…
“En el reverso de las personas se esconden miles de historias que en raras ocasiones salen a la luz”
La reseña de la editorial no entra en detalles sobre la trama de la novela y, respetando ese halo de misterio con el que pretenden envolverla, yo tampoco lo haré.
Baste con decir que encontraremos una historia principal y una secundaria, salpicadas de ráfagas de la realidad que nos rodea, de la insatisfacción y del hartazgo de una sociedad que no acaba de reaccionar. Nos asomaremos a vidas que transcurren entre los desahucios, los despidos, la corrupción política, el acoso escolar, los problemas de pareja, los recortes, la violencia de género… Todo ello condimentado con descripciones y leyendas de Toledo que hacen nacer el deseo de visitar la ciudad, y con un pequeño toque de intriga.
Con una prosa ágil e inmediata (me aventuraré a decir que se nota que el autor “nació” en internet), pero de ninguna forma condescendiente, se nos plantean cuestiones que normalmente no tienen una sola respuesta válida, ya que no hay verdades absolutas, ni nadie está totalmente libre de culpa o responsabilidad. ¿No somos todos cómplices de la corrupción, del sistema social que hemos creado? ¿Tiene el amor fecha de caducidad? ¿Hay que resignarse o dar un paso al frente? ¿Somos más duros juzgando a los demás que a nosotros mismos?
Ante situaciones que todos hemos vivido o sentido, de un lado u otro del espejo, la novela deja en evidencia de que, por muchos esfuerzos que hagamos en evitarlo, tarde o temprano tendremos que enfrentarnos a nuestra propia conciencia… Pero también que, a pesar de todo, no hay que perder la capacidad de ilusionarse y de sentir, porque la vida está llena de sorpresas.
Tengo pendiente “El bolígrafo de gel verde”. Según el sabor de boca que me deje, me aventuraré con esta. En principio, me llama la atención, aunque hay un no sé qué que me tira para atrás… Un saludo.
Yo tampoco he leído “El bolígrafo de gel verde”, ya me contarás cuando lo leas…
¡Saludos!
¡Buena pinta! Me suena este hombre, pero no sé de qué. Ah, estoy leyendo “De qué hablo cuando hablo de correr”. Voy por su ultramaratón de 100 kms., pero sin cansarme.
¡Saluditos Karlsruhanos!
Sí, está bien… Tal vez te suene porque su anterior novela, “Bolígrafo de gel verde”, triunfó en las redes sociales antes de conseguir que se la publicara Espasa. Un caso parecido al de Blue Jeans.
¡Qué bueno lo de Murakami! Espero que te esté gustando. Yo, ahora mismo, estoy sumida en la “tristeza del corredor” (o tengo el síndrome de la fatiga crónica -prefiero lo primero-), pero ¡persisto en mis carreritas!
¡Saludos paradisíacos!