Y las montañas hablaron, Khaled Hosseini
Otro hermoso libro del autor de origen afgano.
En una remota aldea afgana, Sabur, el padre de Abdulá y Pari, se verá obligado a tomar la difícil decisión de vender a su hija para poder sacar adelante a su familia.
En esta ocasión, los terribles sucesos recientes de Afganistán pasan a un segundo plano, y la trama se sustenta en los distintos personajes que iremos conociendo, y que de algún modo están relacionados con la historia de los hermanos, en un recorrido a lo largo de seis décadas.
Nos hará conmovernos y también avergonzarnos: de nuevo Hosseini traza como nadie un mapa de sentimientos y emociones. Sus personajes son hermosos porque reflejan fielmente la condición humana, con sus virtudes pero también con sus miserias. Y es maestro también en retratar todas las vertientes de la amistad y del amor:
“Eso es lo que empaña, lo que contamina la bondad de mamá, así como sus rescates y actos de valentía: el endeudamiento que los acompaña y ensombrece. Las contrapartidas, las obligaciones que impone a los demás. Su forma de usar esos actos como moneda de cambio para obtener lealtad y aprobación”.
Quizás, solo por poner un matiz, la intensidad dramática a la que nos tiene acostumbrados (años después no he olvidado el impacto que me produjo Mil soles espléndidos), se diluya levemente en la variedad que nos plantea, pero es probable que esté condicionada por la lectura de sus novelas anteriores.
Por otro lado, creo que con esta novela Hosseini nos demuestra que es un gran constructor de historias, no necesariamente vinculadas a Afganistán, y que no debemos temer que se encasille.
[…] las montañas hablaron es la última novela de Hosseini. Yo todavía no he podido leerla, pero reseñas como esta de Érase una vez que se era demuestran que no tiene […]